Vida en Tacones

Soy producto de ti. Todo lo que soy te lo debo a ti. Mi cuerpo, mi mente, mis sueños, cada pedazo de mi vida te pertenece. A veces sin darme cuenta me alejo, el estrés de la vida desvía mi camino, confunde mis pasos hasta que ya no se como regresar, me pierdo. Pero tu siempre me encuentras, me atraes a ti. Y es que quizás, antes ti nunca soy un rebaño perdido. Quizás sólo me dejas correr, para que cuando note tu ausencia, en mi dolor y soledad confirme cuan importante e imprescindible eres para mi. Y es que tu Luz llena mi vida. Y es que cuando no estoy cerca de ti, cuando no cuento con tu bendición, cuando pienso que no merezco tu protección, la vida se me hace una carga. Las esperanzas me abandonan y paso sólo a sobrevivir. Un minuto, un instante en comunión contigo, bastan para hacerme volver a creer, a esperar, a sentirme heroína en mi mundo. Recobro las fuerzas. La carga más pesada se reduce a plumas si estas a mi lado. Mis lágrimas brotan sino de felicidad, por lo menos de esperanza. Cuando me toca vivir lo ineludible, me ofreces aliento y sobre todo resignación. Y es que como mi padre que eres, no me abandonas. Estas ahí. Aunque me alejo, aunque me olvido de ti. Aunque aveces sólo te busco cuando ya no puedo más. Aunque sabes que vine ti a porque mis fuerzas me abandonan. Tu lo sabes. Y aun así me recibes. Como si fuese el primer día, sin preguntarme, ni juzgarme, la luz de la luna acaricia mi rostro diciéndose: Bienvenida hija mía. Cómo lo se? Cómo se que me recibes? Lo se porque una paz invade mi cuerpo. Una sensación de que todo irá bien me llena. Y ya no temo. Sólo espero en ti. Mi Dios. Aquí estoy, nuevamente ante ti. En esta noche, donde una canción, una simple canción me recordó que nuevamente me desviaba de ti, de tu luz. En esta noche donde pienso que podría ser la última. Te amo mi Dios..y nada quiero que no venga de ti. Cada paso, cada sonrisa, cada día en mi vida, quiero que sea planeado por ti. Dirígeme mi Dios...haz de mi vida tu voluntad. Aleja de mi todo aquello que pueda des-orientarme de tu presencia. Acercame cada día más a la perfección que sólo tu ofreces. Dame fuerzas Señor para ser un ejemplo. Para influir, con tu amor, en la vida de aquellos,que al igual que yo, estan o han estado confundidos. Hazme instrumento de tu obra.